lunes, 10 de enero de 2011

Referente al Balón de Oro de la FIFA

¿Hasta qué punto es justo un premio individual en un deporte totalmente colectivo? ¿Realmente se valora la actuación del jugador en un año natural o por contra se le da una mayor importancia al mejor futbolista del mundo y al que mayores condiciones tiene? Bien, debemos empezar matizando que cualquier análisis u opinión sobre un premio de estas características es algo mayormente subjetivo ya que cada persona valora unos ítems determinados. También se debe resaltar que hasta la unificación del Fifa World Player y el Balón de Oro, este último era un galardón de un prestigio elevadísimo -por mucho que algunas personas se nieguen a aceptarlo- entregado por una de las publicaciones futbolísticas más destacadas de Europa y del planeta en la que a pesar de no votar seleccionadores ni capitanes, el derecho a voto era ejercido por periodistas de primer nivel, representados en España por Paco Aguilar. 

Pero vamos con lo que realmente importa, es decir, la decisión final. Tras varias filtraciones previas en las que primero Iniesta y a última hora Xavi parecían alzarse definitivamente con el galardón regalando así a España su segundo triunfo en dicho certamen, Pep Guardiola sorprendió a todos -incluso a él mismo- al desvelar el nombre de la tarjeta ganadora: Leo Messi. He aquí el debate, y volvemos a uno de los puntos citados anteriormente el párrafo anterior. El de Rosario puede que a día de hoy sea el jugador más determinante, espectacular y resolutivo del planeta fútbol -o al menos así lo creo-, pero ¿ha sido su 2010 merecedor de un premio que valora las actuaciones individuales en una franja de un año natural? Campeón de Liga y semifinalista en la Champions League con el Barcelona. Nada despreciable pero ampliamente superado por otros jugadores. Pero, una vez analizadas sus estadísticas, su superioridad es aplastante. Los números de Leo con el Barcelona en este 2010 hablan por sí solos -cortesía de 2010MisterChip-: 58 goles y 17 asistencias en 4.456 minutos disputados. Con Argentina sus números son más discretos, y en un año de Mundial quizá le debían penalizar más en favor de sus compañeros de club que finalmente han completado el podio.

Si  bien los números de Messi son espectaculares, haciendo comprensible su elección como ganador del primer Balón de Oro de la FIFA en esta su edición de 2010, la no inclusión de Sneijder entre los tres futbolistas más votados es alucinante. Campeón de Serie A, Coppa, Supercoppa y Champions League con el Inter con participación destacadísima, estelar e importancia máxima en los esquemas de Mourinho así como el subcampeonato del Mundial de Sudáfrica siendo, de nuevo, el jugador más destacado de su combinado. Parece que estos resultados no han sido suficientes para que el holandés -y ya no hablo de ser ganador- haya sido incluido entre los tres mejores futbolistas del año 2010. Como curiosidad, si France Football y la FIFA no hubieran unificado sus premios, Sneijder hubiera sido el ganador del Balón de Oro una vez contabilizados los votos de los corresponsales de la publicación gala. Da que pensar. 

España. ¿No es suficiente ser campeón de un Mundial para que uno de tus futbolistas se lleve el Balón de Oro? Hasta el momento se había cumplido esa ley no escrita, pero por primera vez en la historia, en un año con cita mundialista incluida en el calendario el galardonado no ha sido campeón mundial. Parecía un ahora nunca para que uno de los nuestros igualara a Luis Suárez como único español en conseguir la prestigiosa pelota dorada, pero al igual que sucediera en 2008 tras la Eurocopa de Austria y Suiza, España ha pagado su coralidad. ¿Quién fue el jugador más destacado de España en el Mundial de Sudáfrica? Para mí, personalmente, Busquets. Para otro, Xavi. Para otro distinto, Iniesta. Para un amigo de este último, Casillas, etc. Es decir, esta discrepancia de opiniones demuestra que nuestra Selección no se basa en las individualidades -que por supuesto las tiene- sino que el colectivo es lo que verdaderamente pesa. Quizá por éso somos los actuales campeones del mundo y tenemos el trofeo de oro que realmente importa.

2 comentarios:

  1. La decepción la tenemos todos pero estoy deacuerdo contigo, dejando a un lado las valoraciones subjetivas y personales y los méritos del año 2010 lo que ha acabado decantando la balanza y pesando en la votación es la clave que citas sobre el plano colectivo e individual.
    Lo que ocurre es que nunca tuvimos a tipos tan geniales como Iniesta y Xavi, capaces de pelearle el premio a genios como Messi o Ronaldo.
    Nuestro premio -y el más importante- ya lo vivimos en el Mundial.
    Saludos

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  2. Hola Sergio! Me he sentido muy identificado al entrar en tu blog, porque eres un periodista vocacional. Yo también empece en esto con 13 años y todavía tengo 18... y sueño con ser un futuro periodista deportivo.

    Te agrego en mi blog, vale?

    Un saludo, maquina!

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